miércoles, 8 de enero de 2014

Un hombre murió al inhalar monóxido de carbono mientras descansaba en un barco

Un hombre murió al inhalar monóxido de carbono mientras descansaba en un barco

Junto a su esposa y dos hijos se encontraba descansando, a la hora de la siesta, cuando se produjo una pérdida de monóxido de carbono del equipo electrógeno. Tras dar el alerta de lo sucedido, la mujer y los niños fueron rescatados.

Un suceso se registró ayer sobre el río Uruguay en proximidades de la isla Caridad, ubicada frente a Paysandú. Un joven de Concepción del Uruguay perdió la vida aparentemente por la inhalación de monóxido de carbono.

La víctima fue identificada como Julián Rodríguez, hijo de una conocida familia de Concepción del Uruguay, nieto de un viejo político militante de la Unión Cívica Radical (UCR), José Luis Rodríguez Artusi, y sobrino de la diputada provincial Felicitas Rodríguez.

De acuerdo a los datos consignados por El Telégrafo, en el instante en que el hombre, abogado de 30 años, junto a su esposa y dos hijos se encontraba descansando, a la hora de la siesta, en el interior en una embarcación denominada Anubis 2, anclada del lado oeste del puente internacional Gervasio Artigas, se produjo una pérdida de monóxido de carbono del equipo electrógeno.

Al parecer, ninguno de los ocupantes se habría percatado de la pérdida; sí habría sido vista por particulares, a bordo de una embarcación cercana, quienes se acercaron hasta el lugar. Tras dar el alerta de lo sucedido, la mujer y los niños fueron llevados hasta el puerto de Paysandú, por encontrarse más cercano, y luego conducidos hasta el Hospital Escuela del Litoral, donde quedaron internados en observación y fuera de peligro.
 
Si bien en un primer momento tomó intervención la prefectura del vecino país, se supo que el cuerpo del joven fue entregado a la Prefectura de Colón para las pericias del caso.

Como detectar la presencia de monoxido de carbono en casa

Como detectar la presencia de monoxido de carbono en casa

Esta sintomatología se puede manifestar en debilidad, cansancio y tendencia al sueño, mareos, dolor de cabeza, náuseas y vómitos, entre otros. Además, el riesgo aumenta mientras se duerme y son especialmente vulnerables los enfermos cardíacos y pulmonares, bebés, niños pequeños, mujeres embarazadas y personas de edad avanzada.

El monóxido de carbono se genera cuando falta oxígeno y se produce una mala combustión en aquellos espacios en los que están en funcionamiento chimeneas, braseros de picón, termos, hornillas o estufas de gas.
Las consecuencias para la salud de las personas se agravan cuando no existe una ventilación suficiente y, por tanto, no hay una correcta circulación del aire. El 112 asegura que el color azulado de la llama de los quemadores de cocinas, estufas y calefactores a gas es sinónimo de buena combustión y alerta de que, cuando ese color se torna amarillo o anaranjado, es señal de una mala combustión y, por tanto, existe el riesgo de que se esté generando gas venenoso.
Se aconseja no emplear mientras se duerme cualquier sistema de calefacción con llamas o brasas, como ocurre por ejemplo con los braseros, por el riesgo que entraña al ser imposible detectar los efectos de este gas al estar dormidos.